Sol de la tarde.
Sin su follaje el tilo
lleno de pájaros.


6 Comments:

momiji haiku もみじ said...

Precioso haiku amigo. Los árboles siempre están llenos, siempre nos llenan.

Un abrazo grande

Juan Carlos Durilén said...

Gracias, querido amigo, por pasar y detenerte.
Tu palabra, como siempre, añade algo más al sentido del haiku.

Feliz fin de semana.
Otro gran abrazo.

Leti Sicilia said...

Un haiku muy bello Juan Carlos. Ese tilo volverá a estar lleno de hojas, pero mientras tanto está lleno de trinos. Gracias por compartirlo.

Un cariñoso abrazo.

Juan Carlos Durilén said...

Muchas gracias a ti, querida Leti.

Es verdad lo que dices, en consonancia con lo que afirma nuestro amigo momiji. Aun deshojado, todo árbol es bello. Quizás porque sabemos que esas ramas desnudas son el preanuncio de las hojas nuevas que volverán a cubrirlo; mientras tanto, los pájaros...y más tarde sus nidos.

Otro abrazo, amiga.

Carlos said...

Y yo me pregunto, ¿no es el sol de la tarde el primero que "llena" ese árbol "vacío"? Y como fruto de esa luz... los pájaros, la vida. Los pájaros, sí, como hojas. Luz, árbol y pájaros creando una realidad paralela al árbol con follaje del verano bajo el que se ocultan los pájaros, imagen estereotipada de todo árbol.
Este haiku, para mí, Juan Carlos, rompe "intencionadamente" con esa imagen estándar que todos tenemos para crear una nueva realidad. Ya sabes, no intencionadamente en el sentido de que veas el árbol en invierno y pienses ¿cómo voy a cambiar yo la imagen estereotipada que tengo...? No. Intencionadamente en el sentido contrario: el haijin ve una realidad nueva respecto a lo que para él es un árbol y decide abrirse a ella, dejar que le penetre en el alma... y entonces brota el haiku.
Hay muchas otras lecturas, claro Todas, sin embargo, brotan de la misma esencia que ha captado el haiku en sus tres trazos, en sus tres versos.
Un abrazo

Juan Carlos Durilén said...

Gracias, Carlos, por tan sustancioso comentario.

Es verdad, tanto ese sol de la tarde como los pájaros posados en este árbol desnudo, lo visten con otro "ropaje"; le dan otra vida y otro color. Solo que estas "hojas inquietas" pueden volar y volver una y otra vez a sus ramas... Sin duda, tiene algo de mágico esta imagen.

Aprecio tu visita.
Llegue mi abrazo.