Cae la tarde.
En el pecho de un ave
el sol se va.

6 Comments:

Leti Sicilia said...

Querido Juan Carlos, desde el otro lado del Atlántico te envío todo mi cariño. Espero que lo pases muy bien en estas fiestas y que la felicidad esté presente en tu vida todos los días del año.

Feliz Navidad, un beso.

Juan Carlos Durilén said...

Muchas gracias, Leti.
Por todo tu cariño y por tu hermosa compañía de todo el año.
Lo mismo para ti:
Que lo mejor esté siempre de tu lado, a cada momento.

¡Felicidades!

Otro beso para ti.

Anónimo said...

Hola Juan Carlos,me gusta mucho el haiku,la imagen del ave llevándose al sol en su pecho me parece un buen hallazgo.Soy muy nuevo en lo que tiene que ver con el haiku y estoy tratando de familiarizarme en este asunto,empecé a seguir tu blog,sincereamente me resultan MUY BUENOS tus haikus.Felicitaciones
Te envio un cordial saludo.

Juan Carlos Durilén said...

Muchas gracias, Luezei.
Y bienvenido a este modesto espacio.
Me pone muy contento saber que mis haikus son de tu agrado.
Aprecio mucho tu compañía. Acércate cuando lo desees.
Ya visité tu "Lugarcito de haikus” y me pareció muy acogedor, hecho con cariño.
¡Enhorabuena!

Un fuerte abrazo.

Alberasan said...

El sol se va… pero queda en el pecho ese calor como el abrazo de un amigo.
Gracias Juan Carlos, ojalá estas fechas sean entrañables para ti y tu gente.
Ya charlaremos, hasta pronto

Juan Carlos Durilén said...

¡Qué alegría tu visita, Alberasan!
Gracias por ello y por tus buenos deseos.
Como tú dices, ya charlaremos.
Hay mucho por contar.

Que lo mejor te acompañe, querido amigo.

Un fuerte abrazo.